Acerca del Museo Voelker Orth

A primera vista el Museo Voelker Orth parece ser una casa típica de la clase media en Queens construida en otra época. Con más exploración, se pueden descubrir algunas de las diferencias al igual que las similitudes con las casas y las vidas de los neoyorkinos de hoy.

A través de sus habitaciones de la época y exposiciones giratorias, el Museo ofrece una gama de historias y sirve como marco para explorar conexiones con nuestro pasado reciente.

El Museo Voelker Orth ocupa una casa construida en 1891 que fue comprada por un inmigrante alemán llamado Conrad Voelcker (1861-1930).  Esta casa de más de un siglo fue el hogar de tres generaciones de la familia y su apariencia ha cambiado poco. Muchos de los muebles de la familia han sido preservados, incluyendo un piano Sohmer de 1930 que fue manufacturado en Queens, un juego de dormitorio de niño, y algunas vitrinas. Algunas actividades populares de tiempo libre, como cuidar de violetas africanas en recipientes Wardian, una biblioteca, y un tocadiscos Victrola se reflejan en la colección.

Conrad Voelcker (después deletreado Voelker) emigró desde Edenkoben, un pueblo pequeño cerca del río Rin en la región Palantina de Alemania. Cuando él llegó a Nueva York en 1881 tenía 18 años. El inmediatamente entró en negocios con sus hermanos y se convirtió en un exitoso editor de periódicos de lengua alemana.

En 1899, el año después que Queens vino a formar parte de la ciudad de Nueva York, Conrad se mudó con su esposa y su pequeña hija, Theresa, a Flushing. El compró esta propiedad por  $4,500.

La vecindad quedaba un poco más allá del bullicioso centro de Flushing. Se estaba desarrollando como un nuevo suburbio de clase media llamado Murray Hill, ofreciendo una vida cómoda con un viaje fácil a Manhattan en el ferrocarril de Long Island.

Después de la muerte de Conrad Voelcker en 1930, su hija Theresa (1898-1992), su esposo, Dr. Rudolph Orth, y su hija, Elisabetha se instalaron en la casa. Muchos de los muebles que están ahora a la vista fueron traídos por la familia Orth. Ellos ampliaron la casa, añadiéndole el salón biblioteca que mira hacia el jardín y un dormitorio.

En 1935 la familia adoptó una niña de 9 años a quién llamaron Barbara.

Elisabetha Orth (1926-1995) siguió siendo compañera de su madre de toda la vida. Ella se preparó para ser una maestra y amaba la jardinería, observar las aves, las artes, y la historia. Elizabetha se aseguró que el legado de su familia sería recordado al donar los periódicos de los Hermanos Voelcker al archivo regional en Kaiserlautern, Alemania. Más tarde ella legó su patrimonio para establecer el Museo Voelker Orth, el Santuario de Aves y el Jardín Victoriano.

Al morir Elizabetha en 1995, se formó una Junta Directiva para establecer el museo. La Junta dirigió la restauración de la propiedad a su apariencia de principio del siglo veinte. Una vez completado, el Museo abrió en 2003. Hoy, el Museo Voelker Orth ofrece programación publica durante todo el año.

El Museo continúa siendo un trabajo en progreso – y  más se aprende sobre la familia y la vida en Flushing desde su tiempo hasta la actualidad. La propiedad se convirtió en un Patrimonio de la Ciudad de Nueva York en 2007, asegurando que esta pequeña esquina de la historia de Flushing perdure para ser estudiada, experimentada y simplemente disfrutada por generaciones futuras.

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 Translated by Asian/American Center of Queens College